El aceite vegetal usado es un líquido altamente contaminante para la salud y el medio ambiente, un solo litro de aceite doméstico vertido por el desagüe contamina 1.000 litros de agua. Reciclar correctamente el aceite de cocina usado favorece la conservación de nuestro ecosistema y también ayuda al buen mantenimiento de tuberías y desagües.
Se estima que dos tercios de este residuo acaba en las alcantarillas y provoca el 90% de los atascos en las tuberías municipales y saneamientos, ya que se adhiere a las paredes disminuyendo el caudal de evacuación del agua hasta bloquearlo.
Por otro lado, el aceite de cocina es un producto orgánico que al ser vertido por el desagüe se convierte en alimento de plagas urbanas, malos olores y otros.
Evite los sobrecostes que generan estos vertidos en su municipio y proteja el medio ambiente, transformando los perjuicios que provocan estos residuos en las ventajas que reporta su reciclaje. Reseave pone a su disposición una amplia gama de contenedores personalizados que atenderán cualquier necesidad de su Ayuntamiento.